De todos los aportes nutritivos las vitaminas forman una pieza fundamental en nuestro organismo. Desde su descubrimiento las vitaminas fueron ese ingrediente que comenzó a evitar enfermedades y algún tipo de insuficiencia además, protegían al cuerpo de una manera inusual y por si fuera poco, lo fortalecían.
Dicho esto, queda claro que las vitaminas son esenciales en nuestra dieta diaria y algo de lo que debemos estar bien informados para así saber exactamente cual es el beneficio que nos reporta a nuestro organismo el consumo directo de vitaminas.
Con la llegada del verano las vitaminas tienen una presencia mucho más fuerte en nuestra vida ya que, los productos naturales que tomamos con frecuencia en la dieta diaria contienen un mayor número de éstas. Así, se puede decir que estamos tomando vitaminas de una manera casi involuntaria pero a la vez, gracias a esto, disponemos de una dieta mucho más rica, sana y equilibrada.
En esta ocasión, hablaremos de algunos de los alimentos que contienen un buen porcentaje de vitaminas y que deberíamos de considerar casi imprescindibles en nuestra dieta diaria:
1. La nectarina: su piel lisa la distingue del melocotón, con el que está estrechamente emparentada. La nectarina no es un híbrido moderno, pues se cree que nació en China hace más de 2000 años como una variedad de melocotón, del que ha tomado su nombre botánico.
El nutriente más destacado de la nectarina es el betacaroteno o pro-vitamina A, del que una pieza mediana de 150 g aporta 225 mcg, que satisfacen el 22% de las necesidades diarias de un adulto. Su contenido en vitamina C es también significativo y 150 g cubren el 19% de los requerimientos diarios. Asimismo, su 80% de agua y su 2% de fibra hacen de la nectarina una fruta muy recomendable. Las variedades de carne amarilla suelen ser las más jugosas y dulces.
2. Lechuga romana: extremadamente popular en España, la lechuga romana también es conocida como oreja de burro. Típica de primavera y verano, en esta época se convierte en la protagonista de multitud de ensaladas. Es alargada y bastante grande, de corazón tierno y crujiente. Además de vitaminas aporta potasio, calcio y fósforo. Es preferible escoger ejemplares de hojas más oscuras, y eliminar sólo las exteriores, que son las más estropeadas y las que reciben plaguicidas. Para aprovechar sus nutrientes lo mejor es enjuagarla bajo el grifo más que dejarla en remojo.
Lógicamente existen otros muchos productos con un buen aporte de vitaminas. Sin embargo en cuanto a estadística, estos son dos de los más consumidos al menos, en esas fechas.