El cromo es un mineral que se encuentra en pequeñas cantidades en nuestro cuerpo. Lo solemos almacenar en el hígado y huesos pero también en el bazo o tejidos blandos, con el paso de los años tendremos menos capacidad para acumular este mineral y tendremos menos en el organismo. Aunque es fundamental para el correcto funcionamiento de nuestra salud, la cantidad que tenemos en nuestro cuerpo es y
tiene que ser baja.
Funciones del cromo
Es un oligoelemento mineral fundamental para el metabolismo de los hidratos de carbono, también nos ayuda a controlar la glucosa en sangre incrementando la capacidad de las células para controlar el comportamiento de la insulina.
Metabolismo de los ácidos nucleicos es otras de las funciones básicas del cromo para construir el material genético o el ADN de nuestras células.
El cromo también está relacionado con el metabolismo del colesterol, este mineral es necesario para mantener en parámetros correcto nuestro colesterol.
Alimentos que tienen cromo
Tener una buena dieta es fundamental para adquirir el cromo en nuestro organismo necesario de una manera natural, para ayudar a suplir la carencia podemos usar suplementos alimenticios.
Pero hablando de alimentos que tienen más cromo, existe una lista larga pero los más reconocidos son las vísceras, carnes procesadas pero también en verduras y hortalizas como los tomates, cebollas o
brócoli, también en los cereales integrales y en algunas frutas como las uvas, manzanas, naranjas o bananas. Por otro lado, encontramos este mineral en bebidas alcohólicas como la cerveza y el vino.
Pero es tan importante la obtención de cromo como evitar su pérdida con los alimentos, y hay algunos como la fructosa o los que tienen mucha azúcar que facilitan la pérdida de cromo de nuestro cuerpo.
Carencia de cromo y consecuencias
Una deficiencia de este mineral es perjudicial para nuestro organismo, igual que un exceso. La deficiencia podría darse por una incorrecta alimentación o que algunos procesos en la elaboración de alimentos provoquen la desaparición de este mineral y otros.
Pero también puede ser por un problema o disfunción en el funcionamiento de nuestro organismo. Por ejemplo, por tener resistencia a la insulina (hiperinsulinemia o hiperglucemia).
La carencia del cromo podría acabar en una diabetes, colesterol, hipertensión, hiperglucemia, hiperinsulinemia
y al final en problemas de corazón.
Hay más razones que pueden disminuir el cromo, como son las infecciones, sobre-entrenamiento o ejercicio intenso, el consumo excesivo de alimentos con azúcar o incluso el embarazo.
Quien se lleva bien con el cromo y quién no
Para facilitar la absorción de cromo hemos visto que una dieta correcta es fundamental pero también la asociación con otros nutrientes como las vitaminas (B3 y C), por el contrario algunos medicamentos y los carbohidratos simples se llevan peor con el cromo y entorpecen su asimilación.
Ante cualquier duda consulta a tu médico.