Aunque influyen diversos factores, el insomnio y la alimentación están relacionados entre sí, por lo que a continuación vamos a dar algunos consejos que pueden resultar interesantes para resolver este problema a nuestros lectores.
Condiciones generales
El insomnio es un problema que generalmente se deriva a partir de causas psicológicas como puede ser el estrés, depresión o problemas que nos están acosando en estos últimos días. Por ello, si queremos acabar con el insomnio, es importante que ataquemos el problema directamente desde la raíz.
No obstante, la alimentación juega un papel muy importante frente al insomnio, y es por ello que a continuación vamos a dar algunos consejos interesantes para ayudar a sobrellevarlo mejor.
Una de las cosas que tenemos que considerar fundamentalmente es la alimentación antes de irnos a dormir, es decir, elegir una cena adecuada, evitando los alimentos que puedan dificultarnos conciliar el sueño y optando por otros que nos ayuden a conseguirlo.
Otro aspecto importante es no acostarnos inmediatamente después de cenar (es aconsejable esperar al menos tres horas) además de que dicha cena será ligera para evitar las malas digestiones.
Alimentos que nos ayudan a dormir
Existe un amplio abanico de alimentos que podremos incluir en nuestra cena para conseguir irnos a dormir más relajados. Por ejemplo, la carne ayuda a la segregación de serotonina, que es el neurotransmisor encargado de provocar nuestro sueño.
No obstante, también existen otras opciones como los huevos, el arroz, la pasta, las patatas y otros tubérculos y la calabaza.
Sobre todo evitaremos consumir productos como el café, alcohol y tabaco así como bebidas con cafeína antes de irnos a dormir, cambiándolos por infusiones y leche caliente.