Es importante tener en cuenta la influencia de la alimentación en el estado emocional de nuestro día a día, ya que muchas personas no son conscientes de que la alimentación puede ayudarnos pero también puede acabar convirtiéndose en algo negativo para nuestra salud.
El efecto de la alimentación sobre el sueño
En primer lugar debemos tener en cuenta que una buena alimentación influye muy positivamente en nuestro sueño, además de que evidentemente, si nuestro estado de salud y nuestro peso son adecuados, nuestro descanso siempre será mucho más favorecedor que en caso contrario.
También hay que tener en cuenta de que hay determinados nutrientes que ofrecen efectos distintos sobre nuestro sueño. Por ejemplo, por todos es sabido que la cafeína es un gran enemigo del descanso, al igual que lo es el tabaco, el alcohol, etcétera.
Los procesos químicos en nuestro organismo
Evidentemente, una de las razones por las que la alimentación afecta a nuestro estado emocional se debe a los procesos químicos que se producen en nuestro organismo dependiendo del tipo de alimento que hayamos ingerido.
En este sentido también debemos destacar que existen otras causas relacionadas aunque no demostradas a través de los procesos químicos, y son los efectos psicológicos de dichos alimentos.
El aspecto psicológico
Como hemos comentado anteriormente, el aspecto psicológico también puede suponer un cambio drástico a la hora de ingerir un determinado alimento.
Por ejemplo, existen alimentos que no producen un proceso químico que nos ayude a sentirnos mejor, pero psicológicamente hemos conseguido que así sea.
En definitiva, la alimentación y nuestro estado emocional están íntimamente relacionados.
