Estamos hablando de un alimento abundante en la dieta mediterránea, la cuál es conocida por ser muy saludable. Las olivas o aceitunas , es el fruto del olivo, un árbol característico en el sur de España. Del olivo también se extrae un líquido altamente nutritivo y saludable conocido como el aceite de oliva.
Las aceitunas pueden ser de varios tipos, color y tamaño. Suelen consumirse como aperitivo o para acompañar ensaladas, o también en determinadas comidas, su sabor es intenso y sabroso. Y por supuesto, tras un tratamiento y la elaboración necesaria podemos obtener el líquido de oro o aceite de oliva.
Los olivos son árboles característicos en el sur de España
El beneficio más importante o conocido es que se trata de un nutriente capaz de combatir el colesterol LDL o conocido como malo y a su vez incrementar el colesterol bueno o HDL que tenemos en sangre. Por eso, os animaos al consumo controlado de este alimento.
Hay que recordar que también es una excelente fuente de vitamina A y E , contiene altos valores de fibra, grasas monoinsaturadas como los ácidos grasos omega 3, 6, 9 e incluso proteína de origen vegetal. Se trata de un fruto realmente con aportes excelentes de nutrientes.
Y otras características menos conocidas pero no por ello menos importante es que la aceituna es digestiva y ayuda en la secreción de jugo gástrico, es un laxante natural, buenas para el corazón, o incluso para curar quemaduras (si las chafas y haces una pasta liquida y té la pones en la zona quemada).
¿Tiene algo negativo? Claro que sí, como cualquier alimento en exceso seguramente ya no es tan saludable, aunque la grasa vegetal que tiene es buena para el colesterol no lo es tanto para nuestro aspecto, es decir, si quieres perder peso no es buena idea atiborrarte de este producto. Aproximadamente 100 gramos pueden aportar 120 calorías, aunque parecen muchas calorías, la propia morfología del producto no invita a hacer de él un consumo en grandes cantidades, además el alto contenido de agua (80%) y la fibra también son puntos a su favor para no sea un tabú en nuestras dietas.
Si sufre de hipertensión alta, si que debería limitar el consumo o al menos controlarlo ya que la conservación de las olivas suele hacerse con sal (aumentan el sodio de la oliva) y esto no es precisamente bueno para esta enfermedad.
