Uno de los mayores problemas en relación a la salud que podemos encontrar hoy en día es la obesidad infantil y la obesidad que padecen los más jóvenes, algo que ha ido creciendo en los últimos años en prácticamente todo el mundo.
El problema de la obesidad infantil
La obesidad infantil es un problema que cada vez preocupa más a la sociedad aunque no se ponen los medios adecuados para solucionarla.
Hemos de tener en cuenta que nuestro cuerpo está diseñado para poder acumular grasa en los momentos que hay abundancia de alimentos con el objetivo de subsistir en los períodos de escasez. Esto es una circunstancia genética que en otros tiempos beneficiado considerablemente al ser humano.
No obstante, en la actualidad tenemos siempre al alcance de nuestra mano una gran cantidad de alimentos muy energéticos y muy atrayentes, ya sea por el marketing realizado para su venta que nos hacen quererlos sin necesitarlos o directamente porque se consigue un sabor destacable.
Por otra parte, el estrés de la vida actual y la falta de tiempo hacen que no nos alimentemos correctamente y hagamos lo mismo con nuestros hijos, optando por comidas ya preparadas que contienen una mayor cantidad de grasa y sales que poco a poco van minando nuestra salud.
Cómo evitar la obesidad infantil
Por ello, evitar la obesidad infantil empieza en casa. Es importante que establezcamos un calendario donde incluiremos todos los alimentos de la tabla nutricional, repartiéndolos de la forma más conveniente posible.
Por otra parte, también cabe destacar que evitaremos al máximo posible el consumo de bollería industrial y de platos precocinados.
Debemos tener muy claro que estos gestos serán los que decidan no sólo la longevidad de las futuras generaciones, sino también la calidad de vida que tendrán.